Los polvos metálicos se mezclan con un material aglutinante para formar una materia prima para el moldeo por inyección de metales (MIM). Los polvos suelen tener forma esférica para garantizar una buena fluidez y pueden personalizarse con composiciones y tamaños específicos para conseguir las propiedades deseadas.
Los polvos metálicos más utilizados en los moldes de inyección de metales son varios, entre ellos
- Acero inoxidable: útil en una gran variedad de aplicaciones por su resistencia a la corrosión, solidez y ductilidad.
- Aceros de baja aleación: ideales para aplicaciones industriales exigentes por su gran solidez y resistencia al desgaste.
- Aleaciones de titanio: útiles en la industria aeroespacial y médica, entre otras, por su elevada relación resistencia-peso y su resistencia a la corrosión.
- Cromo-cobalto: comúnmente utilizado en MIM por su alta resistencia, resistencia al desgaste y biocompatibilidad.
